Mascarilla facial Super Gold 50 ml

Comienza con el rostro limpio y aplica suavemente una capa uniforme de mascarilla sobre la piel seca y limpia, evitando el contorno de los ojos. Deja que la lujosa fórmula actúe durante al menos 20 minutos. Enjuaga con agua tibia y completa el ritual con tu crema hidratante Tōtika. Úsala 1 o 2 veces por semana para lucir una tez radiante.

Miel de manuka MGO 823+:

La miel de manuka MGO 823+ es un potente ingrediente natural apreciado por su alta concentración de metilglioxal, que ofrece un cuidado antibacteriano, antiinflamatorio y antioxidante excepcional. En nuestra mascarilla facial Super Gold, nutre la piel en profundidad, calmándola y renovándola mientras duermes. Esta miel única promueve una hidratación profunda y acelera la renovación celular, revelando una tez visiblemente más suave y luminosa al despertar. Un lujoso ritual de renovación de la piel y excelencia botánica.

Propóleo de abeja:

El propóleo es un preciado extracto apiterapéutico, rico en minerales esenciales como magnesio, calcio, níquel y zinc, cada uno con un papel vital en la revitalización de la piel cansada y dañada. En nuestra Mascarilla Facial Super Gold, este poderoso ingrediente nutre la renovación celular a la vez que envuelve la piel en un velo calmante y rico en antioxidantes. Favorece una tez equilibrada y luminosa al reforzar la función de barrera de la piel y promover una superficie calmada y nutrida. Noche tras noche, despierta la piel con una luminosidad renovada. Una elegante expresión del cuidado más reparador de la naturaleza.

Aceite de argán orgánico:

Rico en más del 80 % de ácidos grasos insaturados, el aceite de argán aporta ácidos grasos esenciales (AGE) y ácido linoleico, precursor de la vitamina E conocido por su potente acción antioxidante. En nuestra mascarilla facial Super Gold, ayuda a contrarrestar los signos visibles de fatiga celular y envejecimiento prematuro, promoviendo la regeneración nocturna y la vitalidad de la piel a largo plazo. Fundamental en el cuidado rejuvenecedor, envuelve la piel con una protección antirradicales libres para una tez nutrida y resistente.

Aceite de nuez de macadamia orgánico:

El aceite de nuez de macadamia es rico en ácido palmitoleico, presente de forma natural en la piel joven. Este aceite imita el sebo de la piel, proporcionando una hidratación profunda a las pieles maduras o dañadas por factores ambientales. Cada aplicación favorece una reparación suave y una mayor comodidad, restaurando la elasticidad y la suavidad de la piel, a la vez que refuerza su barrera de hidratación natural. Nota: Evite su uso si tiene alergia a los frutos secos.

Aceite de onagra orgánico:

El aceite de onagra proporciona una dosis concentrada de renovación a la piel que muestra signos de fatiga o envejecimiento. Su alto contenido en ácido gamma-linolénico ayuda a revitalizar las células cutáneas debilitadas, mejorando la textura y el tono. Aplicado durante la noche, actúa para fortalecer y nutrir visiblemente la piel, revelando una tez más firme, suave y radiante.

Maureen 1 de octubre de 2019 Kerikeri

Me encantan sus productos para el cuidado de la piel. Trabajé en farmacia durante 40 años y sus productos son los mejores. Estoy segura de que mis manchas oscuras de la edad también están desvaneciéndose. Les deseo mucho éxito en todo lo que hacen y muchas gracias.